miércoles, 27 de enero de 2010

Modesto (California) y Torrejón de Ardoz (Madrid)

Modesto, California, es una pequeña ciudad al este de San Francisco que, durante los últimos años ha sufrido unas tasas de inmigración que los residentes "de siempre" consideran inaceptables. Lo peor son los chinos que, además de ser multitud, vienen adquiriendo un peso excesivo en los negocios locales, convirtiendo algunos en actividades casi exclusivas, las lavanderías, especialmente. A los munícipes, voceros de tantos ciudadanos respetables de Modesto, les gustaría limitar y hasta reducir el asentamiento de estos desagradables asiáticos. Pero el Ayuntamiento no tiene competencias para regular el movimiento y residencia de las personas; recientes sentencias del Tribunal Supremo de los EEUU así lo ha establecido. Entonces, a un concejal avispado se le ocurre una idea: ¿por qué no aprobar una ordenanza que regule "los usos" admisibles y prohibidos en cada parte de la ciudad? Ciertamente hay usos que no deben estar en el área central de Modesto, que conviene alejar; uno de ellos -¿quién lo negaría?- son las lavanderías, que quedan prohibidas y relegadas hacia la remota periferia. Surge así el primer plan urbanístico basado en lo que enseguida se conocerá como zoning (zonificación, en nuestro idioma) y que muy pronto se copiará en muchas otras ciudades americanas y, no demasiado después, europeas. Estamos en 1885.


En junio de 2008, el Ayuntamiento de Torrejón de Ardoz, Madrid, aprobó el llamado Plan Especial de Adecuación de Usos Comerciales en el que, según El País (y no me fío demasiado pero es que no he podido conseguir en internet el texto de esa normativa), "se estipula, entre otros asuntos, la distancia mínima que debe existir entre bares de copas, supermercados, tabernas, bodegas, salas de baile y de fiesta, bazares, tiendas "todo a 100" y "todo a un euro", locutorios y hasta iglesias. Los comercios de este tipo que ya estén abiertos se salvan del plan siempre y cuando, y dependiendo de cada caso, no se cambie la titularidad del negocio o se suspenda el ejercicio de la actividad durante más de seis meses". Parece que la mayoría de los negocios habituales de los inmigrantes quedan dentro de las actividades reguladas y las distancias que les fijan prácticamente excluyen la apertura de nuevos locales en toda el área central. Para mayor cachondeo, en una revista municipal, se publicita este plan diciendo que limitando las "tiendas de chinos" (sic) el Ayuntamiento pretende evitar molestias a los vecinos y proteger el pequeño comercio tradicional.


Si esto es así (y ya digo que no lo sé de primera mano), nos encontraríamos con que los munícipes de Torrejón recurren a la misma técnica que hace 123 años "inventaron" sus colegas californianos. Verdad es que la "zonificación" nació con descarados fines xenófobos, pero fue evolucionando a lo largo del siglo pasado para convertirse en una herramienta dirigida a objetivos "funcionales" que, por más que haya sido muy cuestionada por sus excesos, parecía haber superado cualquier connotación "subjetiva" (vinculada a las personas o grupos sociales). ¿Volvemos a usar el urbanismo para legitimar torticeramente políticas que nada tienen que ver con la ordenación de la ciudad? ¿De forma tan descarada?


Notas: Añado la última pregunta porque sé que más de uno pensará que las determinaciones de los planes de urbanismo casi siempre obedecen a legitimar intereses "subjetivos". Sin entrar a discutirlo y concediéndolo como hipótesis (que no comparto, al menos no con la rotundidad con la que suele expresarse), hay una diferencia relevante a efectos de este post y es que los intereses subjetivos a los que se suele aludir (que se clasifique como urbanizable la finca de un tío con capacidad de influencia, por ejemplo) son los propios del objeto del urbanismo (ordenar la ciudad); no así, sin embargo, prohibir una actividad específica en ciertos lugares porque se quiere expulsar a quienes la ejercen.

El caso de Modesto como primer antecedente de la técnica de la zonificación y, por tanto, de la competencia del planeamiento urbanístico en la regulación de la admisibilidad de los usos del suelo (que hoy sigue siendo una de sus principales cometidos, si no el más importante), lo cuenta Franco Mancuso en un magnífico libro titulado Las experiencias del zoning, publicado por Gustavo Gili en 1980.

Como anécdota curiosa, Modesto es la ciudad donde nació George Lucas
y que le inspiró su famosa American Graffitti. Hoy en día tiene algo más de 200.000 habitantes y es una aglomeración carente de los valores que solemos elogiar del espacio urbano. Parece que sus precoces experiencias urbanísticas no le dieron demasiado buen resultado.

CATEGORÍA: Política y Sociedad

10 comentarios:

  1. Lo que dices, aún compartiéndolo en parte y desde una experiencia profesional larga y ‘confluyente’ con la tuya, requeriría demasiados matices y me exigiría un comentario más largo que tu propio post.

    Así que voy a ser muy breve y, lógicamente, poco o nada matizado: el urbanismo y la planificación territorial, no tanto como técnicas o saberes aplicados, sino como actividad en la que confluye lo público y lo privado, lo técnico, el usuario y los poderes públicos, ese urbanismo ha fracasado totalmente.

    ese fracaso se ha dado en todos los sitios, sería aún más largo de explicar los 'porqués', pero especiualmente -son ejemplos paradigmáticos- en la Comunidad de madrid y en California. También en Canarias.

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  2. Pues me temos que es así 100 %. No sólo vivo en Torrejón sino que además soy concejal de Torrejón del PSOE.
    Esta es la actitud de nuestro alcalde, vergonzosa, sí. Por lo menos para algun@s, much@s, diría yo...

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  3. Pillado por los pelos (o no) del tema que comentas, amigo Miroslav. Hace unos días encontré por casualidad un documental que Manuel Mora Morales había rodado narrando la davidesca lucha de unos paisanos de Lanzarote propietarios de una pequeña casa de pescadores contra la goliatnesca pretensión de una multinacional de fagocitarla para continuar la ¿urbanización? del trozo de litoral donde se ubica. Tras verlo pensé enlazarlo en un comentario de este blog para ver si tú sabías y me explicabas dónde radicaba el intríngulis del asunto, es decir cómo podrían expulsar por vía judicial, como intentaban, a unos legítimos propietarios, porque en el documental no se especificaba. Luego se me pasó hacerlo.

    Hoy leo en El País
    un informe sobre el tema en el que, además de dar por segura la demolición en unos días de la casa, explicaba que los hermanos sus dueños no tenían título de propiedad porque cuando su padre hizo la casa en 1903 y en aquella zona, no existía la costumbre de registrarla.

    En la historia aparecen acusaciones de fraudes en el registro y ejemplos de un montón de hoteles ilegales que no se derriban. Y una juez muy estricta, o merecedora de otro calificativo. Pero también movimientos ciudadanos surgidos al calor de esa lucha y que parece haber despertado una conciencia de lo dañino que es el urbanismo salvaje, Incluso ciertos atisbos de sensibilización del propio Cabildo, es decir de los políticos.

    Bueno, sólo te animaba a que lo comentaras si te apetece y tienes más datos del asunto.

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  4. No conocía el asunto al que te refieres, Harazem; la verdad es que estoy pràcticamente encerrado y apenas me entero de los convulsos avatares urbanísticos que no me tocan directamente. En todo caso, Lanzarote (y mucho más Fuerteventura) está lleno de tropelías en el litoral. Aunque quizá, en este caso, por lo que leí en El País, se trataría, en lo que se refiere a la familia de pescadores, más de un expolio de la propiedad que de un asunto propiamente urbanístico. Con el agravio comparativo, ese sí urbanístico, de que se cierran los ojos ante muchas otras construcciones, de mucho mayor tamaño, en flagrante situación de ilegalidad. Saludos.

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  5. Volviendo sobre el tema de la utilización del urbanismo para determinar qué usos comerciales y con qué frecuencia habrá en cada zona, ahora tenemos otro componente con la Directiva de Servicios y su transcripción "a la española", llamada Ley Omnibús....

    Te aseguro que en algunas zonas, y no hablo de Canarias, va a ser complicado y difícilmente explicable.

    Por cierto, ahora ya el tema no es sólo de evitación de determinados colectivos raciales en una zona, tambien hay la evitación de "zonas de bares", por ejemplo, aunque eso no siempre se consigue. (Por qué se utilizará el urbanismo para todo menos para ordenar el territorio en serio?).

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  6. ¡Hola! He entrado en tu blog por casualidad, buscando información sobre el concierto de los Beatles en Madrid (Me encanta la historia de los Beatles y Bob Dylan)

    El caso es que mirando los archivos del blog he encontrado este artículo cuyo título me ha llamado mucho la atención, teniendo en cuenta que vivo en Alcalá de Henares (que está a un tiro de piedra de Torrejón) y tengo un amigo que vive en Modesto CA, y toda la historia de la zonificación me ha recordado que aquí mismo en Alcalá, parece ser que han tomado una decisión similar, leí en uno de los periódicos locales que iban a prohibir que pudiera haber tiendas regentadas por asiáticos (vamos, lo que vienen siendo las típicas tiendas de chinos) a menos de 50 metros una de otra en el casco histórico.

    Al principio a mí también me pareció una idea más bien extraña, total, los chinos me han sacado de más de un apuro y no me importa que estén ahi(jeje), pero analizando la "fisonomía" comercial del centro en este momento (por llamarla de alguna manera) creo que la idea no es del todo desafortunada, es francamente alucinante la cantidad (exagerada) de negocios chinos que van desde tiendas de ropa, a tiendas de alimentación, los típicos bazares, etc. Y lo más interesante de todo es que ellos mismos están aparentemente de acuerdo con la decisión, porque se hacen bastante competencia.
    De todas formas el casco histórico de Alcalá le da muchas vueltas al de Torrejón (si es que Torrejón alguna vez ha tenido de eso, jaja) y es una forma de que la Calle Mayor siga siendo pintoresca y no China Town (con todo mi respeto hacia los chinos, que siempre me han tratado bien)

    Una pregunta, la historia de como conociste a Brian Epstein y de las cosas que te contó... ¿autobiográfica o imaginaria? ¡Porque es una gran, gran historia! :D

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  7. Cristina, en mi opinión, cualquier decisión de limitar negocios (legales, claro) en función de quienes sean sus propietarios me parece peligrosísima. De otra parte, la veo muy difícil de implantar en la práctica, máxime con las directivas europeas de libertad comercial (creo que ya ni siquiera las farmacias han de separarse una distancia mínima unas de otras, como era antes).

    En cuanto a la historia de los Beatles en Madrid (que, como casi todas las que empiezo, dejé a medias), lamento decirte que es ficción. El narrador nunca podría ser yo que cuando el concierto tenía apenas cinco años, a un mes de los seis. El relato en primera persona es una mera excusa para contar cosas de los chicos de Liverpool y de Dylan que, esas sí, son reales.

    Saludos y gracias por tu visita.

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  8. Seguramente tengas razón, en cualquier caso yo tampoco le veía sentido a la medida hasta que mi tienda favorita desapareció para convertirse en un bazar, aunque también es cierto que impedir a alguien poner una tienda por ser de la procedencia que sea, no es correcto.

    Y me imaginaba que lo de que conociste a Brian Epstein era ficción, aunque pensé que quizás la parte del concierto si podía ser verídica. (Evidentemente no conocía tu edad jeje) ¡Demasiado bueno para ser cierto supongo!

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  9. Con motivo de tu comentario, he releido los cinco posts que escribí hace año y medio y, a propósito de lo que me dices de "demasiado bueno para ser cierto", quiero aclararte, por si acaso, que quien no existió es el personaje narrador (ni su amiga canaria), pero todo lo demás, hasta en sus mínimos detalles, es verdad. Lo digo para que, si estabas buscando algo sobre los Beatles, no descartes como ficción los datos que aparecen.

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  10. No, claro, lo de demasiado bueno para ser cierto iba por aquello de que hubiera sido genial estar en aquel concierto y luego colarse en el hotel, jeje. Ya se que concierto hubo, y que los Beatles en efecto conocieron a Bob Dylan y la historia de como les introdujo en el consumo de la marihuana.

    Acerca de esto encontré una vez una animación de humor (algo estúpida por otra parte, jeje) sobre esto mismo, esta vez con final inesperado por parte de Bob: http://www.youtube.com/watch?v=ybI34Z_ZHbo
    Jajaja

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